La operación ha consistido en la compra de un edificio de oficinas (asset deal) situado en una de las mejores zonas de Madrid con 9.000 m2 de superficie bruta alquilable.
Debido a los ratios de inversión exigidos por la LSOCIMI, es habitual (casi obligatorio) que el excedente de tesorería que no se reparte vía dividendo se reinvierta en nuevas adquisiciones.